Cuando tus hijos asisten a la escuela, seguramente como padre de familia te preocupa que adquieran todos los conocimientos académicos posibles. Una vez cumplido ese propósito, posiblemente voltearás a ver el tema de su socialización y convivencia. Te preocupará entonces que tus jóvenes estudiantes cumplan las reglas, respeten a los profesores, que tengan muchos amigos y que no sufran ningún tipo de violencia.
Irónicamente, la preocupación debería ser a la inversa, pues si tus hijos logran una sana socialización y convivencia en su centro escolar, el aprovechamiento académico vendrá prácticamente de forma inmediata. Y para lograrlo, las bases familiares son sumamente importantes. Nunca olvides que las enseñanzas que se adquieren desde los primeros años en el seno familiar, sobre todo cuando son fundamentados en ejemplos vivos, son imborrables y transforman de forma directa la conducta de tus hijos cuando se encuentran en entornos ajenos al hogar.
Antes de que tus hijos ingresen por primera vez a la escuela o durante un periodo de vacaciones, es de vital importancia transmitirles valores morales que les permitan conocer el modo de convivir bajo el respeto y la paz. Por ello, aquí te ofrecemos 5 puntos imprescindibles que debes inculcar a tus hijos para que sean capaces de convivir sanamente en la escuela:
AIESEC es una organización internacional, apolítica, independiente, sin fines de lucro, la cual se encarga de un programa de voluntariado que permite a los jóvenes del mundo que se preocupan por problemas sociales aprender desde una perspectiva multicultural, inculcando la paz y desarrollando su potencial humano, con el fin de aportar soluciones innovadoras para trabajar localmente y posteriormente difundirlas en su lugar de origen.
Fundación en Movimiento y AIESEC realizaron una alianza para que estudiantes de otros países puedan hacer su servicio social con nosotros y vivir la experiencia en las escuelas, trabajando con niños de preescolar y primaria para promover ambientes de sana convivencia con nuestro programa “Hipo Hip a la Escuela No Quiere Ir” que será leído en español e inglés.
Estas acciones le permitirán a nuestra fundación llegar a otros continentes, a través del área Incoming Global Volunteers que se refiere a aquellos voluntarios sociales entrantes que se encargarán de llevar el mensaje del respeto a la diversidad y la generosidad a través de los proyectos actuales que nos permitirán prevenir y erradicar el bullying que sufren niños, niñas y adolescentes en el extranjero.
Madden, un niño estadounidense, quien nació con labio leporino y heterocromía iridum (Un ojo de color distinto), fue víctima de bullying en su escuela por dichas diferencias, afectando todos los días su autoestima.
Sin embargo un día su madre le ayudó a cambiar su vida ya que, al navegar por internet, encontró a un pequeño gato con problemas similares a los de su hijo, el cual era ofrecido en adopción. Sin dudarlo se decidió a adoptarlo y fueron, junto a Madden, a recoger al felino.
Cuando Madden conoció a Moon (Así llamaron a la mascota), se dió cuenta de que, en la vida todos tenemos diferencias, algunas más grandes que otras y que, sin dudarlo... "No tiene nada de malo ser único", por el contrario, cada persona puede ofrecer un mensaje de vida a los demás al asumir su "diferencia" con dignidad y ser resiliente ante ella.
La violencia escolar crece a medida que en nuestro país se percibe un entorno más violento, según la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el número de menores afectados por la violencia escolar aumentó en los últimos dos años 10 por ciento, lo cual significa, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar internacional de casos de bullying en educación básica, ya que este comportamiento ha afectado a 18 millones 781 mil 875 alumnos de primaria y secundaria, tanto públicas como privadas.
La mediatización de los casos
Un fenómeno que ha crecido a la par del acoso escolar es la tendencia de los estudiantes a compartir las agresiones a través de las redes sociales con el fin de obtener popularidad y generar polémica entre las comunidades digitales. En la medida en que la información que circula en los medios de comunicación es violenta, la tendencia a "normalizar" y "popularizar" dichos contenidos en medios digitales sociales, sobre todo entre usuarios jóvenes. “A la sociedad ya no le interesa su prójimo, nos estamos acostumbrando a la violencia diaria, y ganar likes y retuits por subir el video de una pelea, es lo que da popularidad entre los chicos”, indica Francisco Martínez León, Jefe del programa Call Center UNAM.
Cuando los estudios Disney-Pixar decidieron lanzar la tercera parte de su exitosa saga Cars, la acompañaron de un interesante cortometraje llamado Lou, el cual pone sobre la mesa el tema del bullying de una forma tan inteligente que, incluso, motivó a los críticos a nominarlo al Mejor Cortometraje de Animación en los Oscar, aunque la estatuilla finalmente fue para Dear Basketball, el corto de Kobe Bryant.
El cortometraje nos ubica en el centro del patio de un colegio en donde nos muestra a un niño que se dedica a robar los juguetes a sus compañeros mientras los molesta constantemente. Mientras tanto Lou, el mounstro que vive en el baúl de los objetos perdidos, decide darle una lección al agresor, dejando al descuebierto muchos de los motivos que llevan al niño a ser violento. El descenlace es tan conmovedor como inesperado y deja en evidencia muchos de los sentimientos infantiles ocurridos en una escuela, casi siempre ignorados por los adultos.
Es por ello que les compartimos algunos puntos interesantes de este emotivo cortometraje:
En días pasados han sucedido casos alarmantes en los que maestros de escuelas de educación básica han sido señalados por sus propios alumnos o por padres de familia, como culpables de ejercer violencia sobre sus alumnos de forma constante y desmedida. Un par de casos, de los más difundidos, son marcados por evidentes abusos de autoridad y hostigamiento por parte de los maestros, quienes agreden de forma constante a algunos alumnos en lo específico, dejando ver posibles conflictos incluso personales que han conmocionado a la comunidad escolar, pero que en ningún momento pueden ser catalogados como casos de bullying de maestros.
Las agresiones físicas de una maestra en San Martín Texmelucan
Uno de los casos más comentados ha sido el del preescolar Fernando Pacheco en San Martín Texmelucan Puebla, en donde padres de familia señalan a la maestra "Paty" por sus "métodos" para corregir a los alumnos que son indisciplinados. La docente lleva a cabo agresiones físicas a los alumnos como método para corregirlos y según su criterio pueden volverse constantes y en contra de un mismo alumno. Ante los señalamientos y denuncias, la Secretaría de Educación Pública anunció el inicio de una investigación para aclarar los hechos. Mientras que, por parte de la maestra señalada y las autoridades del plantel no ha habido ninguna declaración al respecto.
El caso demuestra un evidente abuso de autoridad por parte de la docente, el cual, una vez comprobado, debe ser sancionado por las autoridades correspondientes, pero no puede ser catalogado como bullying por parte de la maestra ya que el acoso escolar sólo puede darse entre pares, es decir entre iguales. Como la maestra es una autoridad en el salón de clases, no es un "igual" que los alumnos y el caso no puede catalogarse como un incidente de bullying por ningún motivo.
Sin embargo las agresiones físicas y al frente de todo el grupo, generan violencia en el entorno y es muy probable que motiven a otros alumnos a iniciar algún tipo de bullying sobre los agredidos por la docente. De tal forma que puede existir acoso escolar en ese grupo, iniciado de forma indirecta por el maestro pero nunca ejercido por él mismo.