Artículos

 

En Córdoba, Argentina, un alumno de secundaria respondió con golpes a los ataques de los que constantemente era blanco por ser autista, siendo atacado física y verbalmente. La situación ocurrió frente a las y los compañeros de clase, así como la maestra quien intentó separarlos.

El menor que ha sufrido humillaciones y agresiones previamente, es más alto que su generador de violencia y esto nos muestra la claridad con la que se presenta el bullying, en donde no “gana el más grande”, sino el que ha aprendido a ejercer autoritarismo de forma negativa.

Aunque las autoridades educativas informaron que se aplicó el protocolo que tienen establecido y dialogaron con los alumnos involucrados y sus padres de familia, es importante trabajar desde la prevención y no esperar a que ocurra. No es justificable una respuesta violenta, sin embargo, podemos ver que muchos menores que son blanco de bullying y del que no sienten apoyo de los docentes, la escuela o padres de familia, en algunos casos va a terminar sacando su frustración con más violencia.

El video, que fue publicado en redes sociales, provocó diferentes reacciones de inmediato.

¿Consideras que estas medidas fueron suficientes? Si analizamos el video a detalle, hay más allá de los menores involucrados, al fondo se escuchan las risas de los estudiantes que han aprendido a normalizar ese caso, la menor que graba, además de burlarse, exhibe a los involucrados con la posibilidad de difundir el video en redes sociales con un mensaje erróneo, para que internautas se sumen al acoso.

Sin duda el bullying ya era una situación de gravedad previo a la pandemia, pero con la falta de límites y de educación digital, las redes sociales ofrecieron un espacio de desahogo para niñas, niños y adolescentes, en el que pueden decir y difundir mensajes cargados de odio sin que nadie les enseñe en qué momento hay que detenerse. Dicha libertad ha permitido que, en el regreso a la escuela, los menores sean más abiertos a expresar cualquier cosa, incluso si ésta lastima a otros.

Fundación en Movimiento, ha desarrollado sus programas de acuerdo a las necesidades emocionales y sociales que los estudiantes necesitan, no se puede simplemente hablar de prevenir la violencia sino les damos herramientas, como las habilidades socioemocionales, para que ellos sepan identificar cuando están en peligro, tener empatía con otros sobre su comportamiento, evitar caer en interacciones agresivas y, además, que sepan gestionar y orientar sus emociones hacia la enseñanza positiva.

El próximo lunes iniciamos con la siguiente generación del curso para niñas y niños Superhéroes de las habilidades socioemocionales, en el que, durante 2 semanas aprenderán habilidades sociales y emocionales como: empatía, autoestima, autocuidado, resolución pacífica de conflictos, solidaridad, paz y logro de objetivos. ¡Lugares disponibles, cupo limitado, inscríbete aquí!

Creative Commons

ccommons

Twitter